domingo, 30 de noviembre de 2008

Las pequeñas cosas


"...olvidamos las pequeñas alegrías por lograr la gran felicidad..."

Con lo bonito que se vuelve todo cuando lo simplificamos.
Nos esforzamos en salir, en ponernos guapisimas, en beber mucho, en bailar más, en saludar a todo el mundo, en hacer ver que nos llevamos bien con todos. . .
Yo prefiero el otro lado, coger el coche, sin rumbo fijo, perdernos por pequeñas carreteras, esperando a alcanzar esa nieve del fondo. Sin prisas, sin reloj, sin motivo.
Y es que ayer, pequeñas cosas como un viaje a ninguna parte sin más, diez minutos jugando con un perrin de pueblo, un café en un mesón apartado del mundo, o el frío en los huesos y la sonrisa en los labios, me hicieron olvidarme por un momento de malos rollos, de discotecas, de ruidos, de humo, de falsedades, de sonrisas forzadas y de tanto afán en demostrar no-se-qué a no-se-quién.

Próxima parada: Ribadesella.
(o no, quien sabe!)

*irmi*
(simply)

1 comentario:

Candela dijo...

me gusta leerte, con tanta energia..

y tanta claridad..

Yo necesitaba justo lo de salir, el ruido y la compañia -de verdad o no-

cada enfermedad con su receta.

Un beso wapa